AGRESION CONTRA PERIODISTAS EN PUERTO RICO
Agentes del FBI lanzan gas pimienta y golpes contra la prensa de Puerto Rico el viernes 10 de febrero de 2006. Al centro, Normando Valentín, en la derecha, el fotoperiodista André Kang, del peródico Primera Hora, siendo agredido por los agentes. Diez periodistas resultaron lesionados, dos de ellos seriamente. (fotos de Primera Hora)
"Como 'Viciosa, revanchista y antidemocrática' calificó el presidente de la Asociación de Periodistas de Puerto Rico (ASPPRO), Oscar J. Serrano, la agresión de agentes del FBI contra los periodistas. "Los agentes no usaron la fuerza y el gas para defenderse, los usaron ofensivamente para atacar a la prensa", sentenció Serrano.La condena de la ASSPRO no fue aislada, se sumó a la de los directivos del Overseas Press Club (OPC), de la Asociación de Fotoperiodistas y del Centro para la Libertad de Prensa (CLP)."
Al Departamento de Justicia Federal, cuando elaboró su informe en contra de la policía con relación a los derechos civiles, se le olvidó que tienen techo de cristal. Los agentes del FBI constantemente violan los derechos de los civiles, en E.U. y sobretodo en PR. ¿Quién los supervisa? Pues nadie. Tienen carta abierta de hacer lo que se les venga en gana y tienen licencia para esto y para colmo, la corte Federal en PR le aprueba sus fechorías. Este es el caso de lo que ocurrió en este hecho y en otros muchos.
Al Departamento de Justicia Federal, cuando elaboró su informe en contra de la policía con relación a los derechos civiles, se le olvidó que tienen techo de cristal. Los agentes del FBI constantemente violan los derechos de los civiles, en E.U. y sobretodo en PR. ¿Quién los supervisa? Pues nadie. Tienen carta abierta de hacer lo que se les venga en gana y tienen licencia para esto y para colmo, la corte Federal en PR le aprueba sus fechorías. Este es el caso de lo que ocurrió en este hecho y en otros muchos.
Cuando mataron a Filiberto Ojeda, ¿a quién le importó? Pues a muy pocos por que mientras no sea mi familia, no nos importa, pero es cuestión de tiempo que un día sea a uno de tu familia. Ya es hora de decir, ¡basta ya! y denunciar los atropellos de este grupo con licencia para matar.